El año 2020 se truncó en el mes de marzo para AUARA, empresa social que destina el 100% de sus dividendos a llevar agua potable a países que carecen de ella. Con el cese de actividad económica, sus iniciativas en curso y sus ventas prácticamente se paralizaron. Sin embargo, el buen funcionamiento de sus proyectos en marcha en Asia, África y Latinoamérica, su aportación excepcional durante el momento álgido de la crisis sanitaria vivido por la sociedad española y la reactivación posterior al confinamiento han dado lugar a los mejores datos de impacto de su historia.Durante el pasado ejercicio, la compañía fue capaz de generar cerca de 38,5 millones de litros de agua potable mediante la construcción de pozos o la instalación de tanques de recogida de agua de lluvia en comunidades en situación de pobreza extrema de 17 países. Esto supone haber triplicado el volumen de agua generado en 2019, y que en total, desde su nacimiento en 2016, AUARA haya conseguido proporcionar a estas comunidades un acumulado de más de 72,4 millones de litros de agua potable.Actualmente, son ya 94 los proyectos o infraestructuras activas que cada día abastecen de agua o saneamiento a sus poblaciones. De ellos, 24 se han puesto en marcha durante el pasado año, gracias a la colaboración de sus socios en el terreno, como la Fundación Kirira, la Fundación Esperanza y Alegría o las ONG Sauce o Alboan, entre otros.En total, en estos cuatro años AUARA ha cambiado la vida a más de 57.400 personas (de ellas, más de 15.200 son beneficiarias directas de los proyectos realizados en 2020), que en lugar de tener que caminar durante horas para llenar sus bidones en fuentes agua de dudosa calidad, vehículo de infecciones y enfermedades, ahora cuentan con agua potable para cubrir sus necesidades básicas de consumo e higiene. “Solo en 2020 hemos conseguido ahorrar a las mujeres y niñas de esas comunidades, que son quienes normalmente van a buscar agua para abastecer a sus familias, más de 1,1 millones de horas que han podido dedicar a ir a la escuela o a realizar otras tareas productivas para la comunidad. De este modo, estamos contribuyendo a que no se perpetúen las condiciones de desigualdad en estas comunidades y a mejorar sus expectativas de futuro”, sostiene Antonio Espinosa de los Monteros, CEO y cofundador de AUARA.#AguaParaHospitales, su aportación a la pandemiaTras el decreto del estado de alarma y el confinamiento domiciliario, cuando los centros hospitalarios y asistenciales de todo el país vivían su situación más crítica desde el punto de vista sanitario, AUARA decidió poner todos sus recursos al servicio de la sociedad española mediante la iniciativa #AguaParaHospitalesCOVID19. Durante cinco semanas, la empresa social donó más de 1 millón de litros de agua embotellada a personal sanitario y pacientes de coronavirus de 104 puntos entre hospitales, residencias de mayores, hoteles medicalizados y centros asistenciales de todo el territorio nacional. En ello empleó sus propios recursos y, a través de una campaña de crowdfunding, recibió el apoyo de 3.000 particulares y 25 empresas que aportaron a la causa un total de 230.000 euros. “Nunca olvidaremos esas semanas. Fueron días de acabar exhaustos, de no dar abasto para movilizar todo lo necesario para que esos centros que nos lo solicitaban pudieran recibir el agua embotellada que tanta falta les hacía. Fue muy gratificante, en medio de una situación tan complicada, poder poner nuestra gota de agua para ayudar a quienes estaban en el frente del problema. El agradecimiento y el cariño que recibimos de tanta gente nos ayudó a superarnos”, apunta Antonio.Apuesta integral por el plástico recicladoEn lo que respecta al impacto medioambiental, cabe destacar que AUARA ha sido la primera empresa en Europa y es la única empresa española de bebidas que fabrica la totalidad de sus botellas con plástico rPET 100% reciclado. Durante 2020, esto se tradujo en la reutilización de más de 64.300 Kg de plástico, equivalentes a cerca de 2,9 millones de botellas recicladas, lo que supuso dejar de utilizar más de 107.200 litros de petróleo y evitar las emisiones de 82.000 Kg de CO2 a la atmósfera.Sumando estas cifras al acumulado desde su nacimiento, la empresa social ha dado una segunda vida a 309.200 Kg de plástico, equivalentes a 13,7 millones de botellas, y ha ahorrado 515.500 litros de petróleo y 393.700 Kg de CO2. |